Después
de lo ocurrido el 5 de junio en donde el Partido Revolucionario Institucional
perdiera en Durango la gubernatura, la alcaldía y los cinco distritos de la
capital, para los priistas ha iniciado un proceso de reestructuración primero; porque deben desde
ya, fijarse la postura de oposición (a muchos no les ha caído el veinte) y
segundo porque el Comité Directivo Estatal del PRI será la base dese la cual se
pueda emprender una ruta de reposicionamiento, que les permita circular con éxito
la transición y con ello llegar con alguna fortaleza para el proceso electoral
de 2018.
La
renuncia de Manlio Fabio Beltrones a la dirigencia nacional después de los resultados
obtenidos en donde el PRI perdiera siete de las doce gubernaturas en juego, abrió
el espacio a la especulación sobre la renuncia también de Ricardo Pacheco del
comité estatal, ante lo cual comenzaron a surgir nombres de sus posibles
sucesores, en cuya lista figuran personajes como Héctor Vela, actual secretario
de Educación, Jorge Mojica, por su cercanía con Lety Herrera, Jorge Iván Domínguez,
quien regresa después de haber permanecido exiliado por el grupo en el poder,
Ali Gamboa, diputada federal, y hasta del propio Esteban Villegas, quien a últimas
fechas pareciera haberse enfriado en su intensión, dada la animadversión que se
generó entre los diferentes grupos al interior, su descarte le podría llevar a
ocupar una delegación federal.
La
determinación de quien habrá de ocupar la presidencia del partido se dará de
acuerdo a las fortalezas de los diferentes grupos, con el aval de la dirigencia
nacional y quizá aun con la anuencia del gobernador saliente Jorge Herrera
Caldera quien podría tener un voto de calidad hacia uno u otro. El perfil
deberá ser capaz de aglutinar a las diferentes corrientes en la conformación de
un proyecto que resulte atractivo para todos los priistas, pero sobre todo que
sea capaz de lograr que como oposición logren resurgir de manera positiva para
2018, máxime porque sea quien fuere, los priistas en Durango no están
acostumbrados a hacer política en la austeridad y sin duda las condiciones económicas
serán muy limitadas o al menos no en la abundancia como habían venido operando.
Por
medio de las redes sociales, twitter para ser específico, han surgido ejercicios
de medición entre los cuales se evalúa a los actores que se han visto con
posibilidades, si bien, al final estas mediciones no tendrán mucho que ver con
la determinación de quien pueda ser ungido como nuevo presidente, al menos
puede darnos un indicativo de cuál es el posicionamiento de cada uno de ellos,
el primero lo realizo el usuario @PoliticaymasDGO en donde a la pregunta ¿Quién
le gustaría como presidente del PRI Durango? Y en cuyas respuestas aparecían Héctor
Vela, Jorge Mojica, Aly Gamboa y Jorge Iván Domínguez, con una participación de
528 votos el 42% resulto a favor de este último, seguido por Aly Gamboa con el
29%.
Otra
medición fue realizada por Luis Ernesto Lozano a través de su cuenta @luizork
en cuya encuesta realizada en dos partes, en la primera con 289 votos, Otniel
García obtiene el 40% de preferencia sobre Arturo Yañez, Oscar García y Héctor
Vela, en la otra parte con una participación de 498 votos, Jorge Iván Domínguez
vuelve a imponerse con el 54% sobre
Rosauro Meza, Esteban Villegas y Jorge Mojica.
Como
lo dije en párrafos anteriores, quizá estas mediciones tengan poco que ver con los
mecanismos que al final habrán de implementarse para la designación, en donde seguro
estoy habrán de cobrarse facturas y saldrán a relucir rencores, sin embargo, las
aguas se mueven y lo cierto es que los grupos están al acecho, para muchos, el
partido les representa quizá la última oportunidad de su participación política
de ahí la importancia de incrustarse en esta nueva era del PRI en Durango, la
era de la alternancia.
Falta
ver quienes permanecen, ya lo dice el viejo adagio: “Cuando la pobreza entra
por la puerta, el amor salta por la ventana” hoy para el PRI lo que sigue es hacer
política a suela, sudor y saliva, ¿Quién se anima?