Por: Luis Villarreal Gil @luisvillarrealg
A unos días de que dé
comienzo de manera formal la contienda electoral para renovar el congreso y los
ayuntamientos, partidos, candidatos, equipos y estrategias parecen estar listas
para contender en lo que será un proceso meramente protocolario, al menos en lo
que respecta a la capital del Estado, puesto que ya casi está definido, y es que verá
Usted, lo que parecía de inicio sería una contienda sumamente competida,
terminó por regularizarse y devolverse el peso en su justa medida a cada actor
y partido político, puesto que de aquella alianza que se vislumbraba en la que
participarían los partidos de izquierda junto con el PAN al final, sólo se pudo
concretar entre éste y el Partido del Trabajo misma que volvió a derrumbarse tras
las impugnaciones realizadas ante el Tribunal Estatal Electoral por los propios
panistas, quedando esta unión sólo “de facto” a decir de los propios dirigentes
de ambos partidos.
Otra de las fortalezas que
al inicio les generaba una percepción de ventaja para el proceso en aquel
entonces, era la posibilidad de que el abanderado fuera Aispuro, lo cual no sólo
no sucedió sino que incluso le limitaron el espacio que pudiera haber negociado
en la planilla para incluir al joven Aguado (su principal operador), situación
ante la cual se puede vaticinar que “el Güero” no meterá las manos a favor ni del
PAN ni de Jorge Salum.
Como si eso no fuera
suficiente, la campaña de Salum no ha logrado despegar ni despertar los ánimos
ni siquiera de los propios panistas quienes en su gran mayoría repudian en lo
que se ha convertido su partido, ante la ambición y los intereses del
grupúsculo que se ha apoderado de él, encabezado por Víctor Hugo Castañeda
quien ha sucumbido a las órdenes del “zar de los Cadis” Gonzalo Yáñez. Sólo
falta esperar como habrán de llevar el curso de su campaña de promoción, puesto
que los petistas deberán registrar candidatos y se verán obligados a garantizar
un mínimo de votación para mantener el registro, por lo que no me queda claro
como los del PT pedirán el voto para los panistas “de facto” y también para ellos y los panistas lo propio,
total que es un reburujadero que al final les mermará considerablemente a ambos
partidos.
La contraparte se encuentra
en la alianza “para seguir creciendo” conformada por los partidos
Revolucionario Institucional, Verde Ecologista, Duranguense y Nueva Alianza,
quienes participarán en la contienda juntos en las 39 alcaldías y cinco de los distritos
electorales y en donde parece haber un buen ánimo de negociación y acuerdo que
se ha solventado de la mejor manera puesto que, a pesar de ser más los
intereses por las fuerzas políticas que intervienen, no se vislumbran fracturas
lo cual hace pensar que entraran enteros a la contienda.
En lo que respecta a la
capital del Estado, Esteban Villegas parece haber emprendido una campaña de
saneamiento e inclusión a la que se han sumado todos los sectores de su
partido, las estructuras de los partidos que participan en coalición, ex
gobernadores, e incluso panistas de renombre que al ver que su partido ha
perdido el rumbo ven en el galeno-cantante la mejor opción para llevar los
destinos administrativos de Durango municipio.
En lo que respecta al PRD
que prefirió aplicar la de “más vale solo que mal acompañado” parece que
tendrán una participación decorosa o al menos congruente con sus postulados, que
ante el escenario de crisis de la izquierda que se vive actualmente en Durango,
con un mensaje adecuado y una estrategia bien dirigida, actuarán de receptores cachando
votos emigrados particularmente del PT ante la debacle de este instituto político
por su falta de seriedad, corrupción y la ambición de sus dirigentes.
Y ya para finalizar, creo
que el Movimiento Ciudadano del Dr. José Ramón Enríquez, con todo respeto, no
representa a nadie ni desquita el gasto que los ciudadanos hacemos en mantener
su ineficiente estructura, al menos en lo que a Durango corresponde, no creo
que esta elección vaya a justificar en votos el gasto excesivo que realizó
apenas en la precampaña en espectaculares y anuncios tratando de compensar lo
que no ha hecho en las calles y directamente con la gente, a ver si no se mete
luego en temas de fiscalización que no pueda cubrir, lo que a mí se me hace
raro es que a las prerrogativas de su partido difícilmente le alcanzaría para
solventar la campaña que ha emprendido, lo cual seguro le puede acarrear
problemas ahora que el tema del recurso es tan riguroso.
Así pues el próximo día 15
de mayo dará inicio de manera formal la campaña en un proceso, que de seguir así
las cosas, está ya etiquetado con el triunfo de Esteban Villegas, la principal diferencia
que encuentro entre una y otra coalición radica precisamente en la intención,
la del PAN ha estado siempre sustentada en la ambición de hacerse del poder no por
el hecho de gobernar mejor sino con el único objetivo de que el PRI ya no
gobierne, la del PRI en cambio es un proyecto conjunto, una suma de voluntades
en la búsqueda del bienestar social, que conste, no es porque yo lo diga, la
gente se da cuenta.